Para corregir los problemas anatómicos asociados con la infertilidad y la pérdida del embarazo, el médico puede recetarle una laparoscopia o una histeroscopia
La laparoscopia y la histeroscopia son dos de los procedimientos más comunes para diagnosticar la infertilidad de una mujer o corregir los problemas que causan infertilidad y aborto espontáneo.
La laparoscopia, también conocida como cirugía mínimamente invasiva, es la visualización directa de la cavidad peritoneal, los ovarios, el exterior de los tubos y el útero mediante el uso de un laparoscopio. La laparoscopia a menudo requiere solo unas pocas incisiones de 0,5 cm a través de la pared abdominal. El cirujano inserta un laparoscopio en el abdomen a través de estas pequeñas incisiones para ver y hacer correcciones quirúrgicas a las estructuras pélvicas involucradas. El laparoscopio es un instrumento similar a un telescopio en miniatura con un sistema de fibra óptica, que lleva luz al abdomen. Es tan grande como una pluma estilográfica y el doble de larga.
Se colocará un instrumento para mover el útero durante la cirugía en la vagina. Se introduce dióxido de carbono (CO2) en el abdomen a través de una aguja especial que se inserta justo debajo del ombligo. Este gas ayuda a separar los órganos dentro de la cavidad abdominal, lo que facilita que el médico vea los órganos reproductivos durante la laparoscopia. El gas se extrae al final del procedimiento.
La laparoscopia es un procedimiento menos invasivo que la cirugía abdominal abierta y permite una recuperación más rápida con un menor riesgo de formación de adhesión (tejido cicatricial). La mayoría de los pacientes se van a casa el mismo día del procedimiento y regresan al trabajo 3-4 días después.
Durante una histeroscopia operatoria, se inserta un pequeño histeroscopio a través del cuello uterino y se introduce en la cavidad uterina con el paciente dormido bajo anestesia general. Al igual que un laparoscopio, el histeroscopio es un instrumento similar a un telescopio en miniatura con un sistema de fibra óptica, que aporta luz al útero. Este procedimiento permite ver directamente la cavidad uterina y permite al médico corregir quirúrgicamente la anomalía.
Los pacientes se van a casa el mismo día del procedimiento y, a menudo, pueden regresar al trabajo al día siguiente.