Aunque Kathy Bero se sometió a cirugía, quimioterapia y radiación para combatir su cáncer, cree que fue un cambio a una dieta antiangiogénica lo que realmente fue el factor decisivo en su recuperación. Ahora, los científicos de la Universidad de Harvard en Massachusetts están investigando afirmaciones sorprendentes como esta para comprender mejor cómo los pacientes pueden hacer recuperaciones de cáncer aparentemente milagrosas.
La madre de dos hijos fue diagnosticada con cáncer de mama inflamatorio en 2005 a los 41 años de edad. No había tratamientos disponibles que ayudaran a prevenir la enfermedad, y cuando su hígado y riñones comenzaron a fallar, se preocupó por lo peor.
«Mis pulmones estaban dañados. Mi corazón estaba dañado», dijo Bero, informó WLBT. «Le dije a mi oncólogo que terminé con ese protocolo porque de una forma u otra, voy a morir. Y no quiero ir por ahí.»
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En este punto, Bero tomó una ruta no tradicional para su tratamiento contra el cáncer y siguió una dieta antiangiogénica. La dieta se utilizó en combinación con la meditación y un tipo de tratamiento alternativo llamado Reiki, que implica canalizar energía.
El tratamiento para el cáncer en el hogar de Bero aparentemente funcionó, y ahora, más de 12 años después, aún no tiene cáncer. La historia de Bero es tan notable que los científicos de la Universidad de Harvard están interesados en aprender más sobre su dieta y plan de recuperación. El estudio analizará a varios sobrevivientes de cáncer notables que, como Bero, tuvieron recuperaciones excepcionales. El estudio de Harvard tiene como objetivo encontrar algunas similitudes entre estos individuos, ya sea su dieta u otros factores como su fe, actitud o sistema de apoyo.
«Creo que es una buena premisa, ha habido algunos casos aislados en los que la gente siguió la dieta», dijo la Dra. Nieca Goldberg, directora médica de Joan H. Tisch Center for Women’s Health en NYU Langone Medical Center en Nueva York, dijo a Newsweek. «Si hacen un estudio grande, eso sería un buen cuerpo de información y pondría fin a si estos casos aislados estaban asociados con la dieta o no.»
Según la Fundación Angiogénesis, la angiogénesis se refiere al crecimiento de nuevos vasos sanguíneos capilares. Por lo tanto, una dieta antiangiogénesis bloquearía la formación de nuevas células sanguíneas. La idea es que esto podría prevenir la propagación del cáncer, informó WLBT. La Fundación de Angiogénesis informa que el crecimiento anormal de los vasos sanguíneos también está en la raíz de muchas otras afecciones, como la ceguera relacionada con la edad, las úlceras diabéticas, las enfermedades cardiovasculares y los accidentes cerebrovasculares.
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Los alimentos antiangiogénicos incluyen verduras como papas moradas, zanahorias y puerros. Bero explicó a WLBT que su dieta también incluía bayas, nueces, té verde y hierbas, como el ajo.
«Creo que una dieta saludable es buena en una gran variedad de enfermedades», dijo Goldberg. «Hay un vínculo entre el cáncer de mama y la obesidad, por lo que soy una gran defensora de las personas que siguen una dieta saludable. Creo que desempeña un papel importante en la prevención de enfermedades.»