«Gracias a Dios, No me estoy Volviendo Loco»
Un comentario frecuente que Angelo recibe de sus 30,000 usuarios mensuales es, » Gracias a Dios, no me estoy volviendo loco.»
«Ese es el poder de la comunidad», explica. «Las mujeres están experimentando lo mismo y quieren hablar de ello. Si genneve les brinda un poco de comodidad o apoyo, se lo recomendarán a cinco de sus amigos», explica.
Al conectar esta comunidad de mujeres a una red curada de expertos en menopausia, algo que nadie más está haciendo en este momento, señala Angelo, genneve busca convertirse en la «primera clínica en línea para mujeres en menopausia».»
Sentirse cómodo con el fracaso
El emprendimiento es nuevo para Angelo. Pasó 15 años en Microsoft, más recientemente como Jefa de Personal de la CMO. La parte más difícil de ser empresaria, admite, es aprender a fracasar y estar de acuerdo con ello.
«Sentirse cómodo con el fracaso y aprender a pedir ayuda, eso es lo que te hace o te rompe como emprendedor», explica.
Dice que su mayor fracaso hasta la fecha ha sido no rodearse de personas que la apoyen.
«Nunca me di cuenta de hasta qué punto necesitas que tu junta directiva, tus asesores y tu equipo estén constantemente poniéndote energía en ti, en lugar de acumularte presión o chuparte con preocupación por cosas que pueden no funcionar», explica. «He sido demasiado lento para sacar de mi lista a ese tipo de personas que no me apoyan.»
También ha aprendido el valor de ralentizar y ser más reflexiva en su toma de decisiones.
» Tengo un deseo excesivo de innovar», admite, » en lugar de ser paciente y centrado. A principios de este año, estaba muy ansioso por actualizar nuestra plataforma y tomé una mala decisión en el equipo de desarrollo. Sacamos la tecnología demasiado pronto, y rompió nuestra búsqueda.»
Los 25,000 visitantes mensuales del sitio se desplomaron a cero porque Google ya no sabía qué buscar. Angelo tuvo que tomar la difícil decisión de derribar el nuevo sitio, dejar ir al equipo de desarrollo y empezar de nuevo.
«Fue un error caro», admite Angelo.