A lo largo de nuestra vida, todos hemos sufrido algún tipo de lesión de mayor o menor gravedad. En esos casos, adquiere gran importancia la forma de abordar el problema; es decir, la atención y los cuidados puestos para lograr la curación. Por ello, a continuación te comentaremos cuáles son los pasos para curar una herida infectada de forma higiénica.
«Las heridas pueden producirse por agentes externos (cuchillos, vidrios, latas, alambres,etcétera) o agentes internos (hueso fracturado)» explica la doctora Funes Rivera. Asimismo, indica que cuando una herida no se atiende de la forma correcta o simplemente no se le presta la atención necesaria, es muy posible llegue a infectarse y que el problema empeore.
Por otra parte, si ya la herida se ha infectado, será indispensable limpiarla. ¿Quieres saber más al respecto? En ese caso no dejes de leer todo lo que vamos a comentarte a continuación.
¿Cómo cuidar una herida?
Cualquier herida abierta es susceptible a infecciones, si no se controla puede propagarse a la piel que se encuentra alrededor, causando diversas complicaciones.
Si te has hecho una herida, ya sea por corte, desgarro, contusión o quemadura, es muy importante que sigas los siguientes pasos:
- Observar la herida con detenimiento, de esta manera sabrás su nivel de gravedad.
- Lavar la herida con agua templada y jabón, así eliminarás cualquier suciedad que pueda tener. Si el agua no es capaz de eliminar todos los desechos dentro de la herida, será necesario utilizar unas pinzas.
- Evita cualquier infección utilizando crema antibiótica de aplicación tópica durante al menos un día.
- Cubre la herida con un vendaje, de esta manera podrás mantenerla limpia y sin riesgo de infección.
- Observa la herida mientras evoluciona para asegurarte de que no se infecte.
Finalmente, para determinar que no se ha infectado:
- Será indolora al tacto.
- No tendrá signos de inflamación.
- Tendrá una temperatura normal, ni alta ni baja.
- Su color será sonrosado e irá aclarándose con el tiempo.
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¿Cómo saber si la herida está infectada?
Si no estás seguro de tener una herida infectada, puedes saberlo con cualquiera de estos signos:
- Secreción de pus.
- Mal olor y aspecto.
- Ausencia de señales de cicatrización.
- Fiebre local o general, acompañada por enrojecimiento continuo de la zona, inflamación en los bordes y sensibilidad
- Dolor persistente, incluso con suaves movimientos. En casos extremos se pueden detectar sensaciones punzantes.
Con estas señales podemos estar seguros de que la zona se encuentra infectada por alguna agente patógeno, y debemos tratarla con mucho cuidado antes de que empeore.
¿Cómo curar una herida infectada?
Si la herida reúne varios o todos los síntomas anteriores es fundamental que comiences a tratarla de inmediato siguiendo los siguientes pasos que vamos a detallarte a continuación.
Desinfectar la herida
Es lo primero que debemos a hacer, pues una herida infectada jamás podrá sanar. Para poder hacerlo tenemos que:
- Lavar la herida con suero fisiológico y jabón neutro, estos dos productos se encargaran de desinfectar la herida y regular el pH de la zona.
- Secar con una gasa estéril, así evitarás cualquier bacteria que exista en la toalla o servilleta.
Cuando hagas esto, debes asegurarte de eliminar toda la secreción o suciedad que se encuentre en la herida y dejarla completamente limpia.
Aplicar un medicamento antibiótico
Tras haber secado la herida infectada, debes buscar una pomada antibiótica y aplicarla sobre la zona afectada. Esto deberás hacerlo entre 2 y 3 veces por día, lavando la herida cada vez que vayas a aplicar la pomada. Este proceso debe durar al menos 5 días para asegurarte de eliminar por completo la infección y acelerar el proceso de curación.
Resguardar la herida
Necesitarás resguardar la herida bajo un vendaje, evitando así la contaminación o una nueva infección en la zona. Para esto te recomendamos gasas estériles.
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Mantener la herida supervisada
Por último, es de vital importancia mantener la herida supervisada y vigilar su evolución. En caso de no observar ninguna mejora, es necesario que acudas a tu centro médico de confianza, donde medirán el grado de infección de la herida y te recetarán los medicamentos oportunos para su cicatrización.
En caso de que tengas dudas acerca de cómo abordar una herida infectada, lo mejor será que solicites atención médica (vía telefónica, si te resulta más cómodo) y sigas los pasos que te indiquen los profesionales. Por otra parte, bajo ninguna circunstancia utilices ungüentos naturales u otros productos que tengas a mano que no estén específicamente indicados para el tratamiento de heridas, ya que esto podría resultar contraproducente. Tampoco te apliques medicamentos vencidos.