La adenomiomatosis de vesícula biliar (GB) (ADM) es una anomalía benigna adquirida, caracterizada por hipertrofia del epitelio de la mucosa que invagina en los intersticios de una muscularis engrosada que forma los llamados senos paranasales de Rokitansky-Aschoff. Existen tres formas de ADM: segmentaria, fundal y, más raramente, difusa. La etiología y la patogénesis no se conocen bien, pero la inflamación crónica del GB es un precursor necesario. La prevalencia de ADM en muestras de colecistectomía se estima entre 1 y 9% con una proporción equilibrada de sexos; la incidencia aumenta después de los 50 años de edad. La MAD, aunque generalmente asintomática, puede manifestarse como dolor abdominal o cólico hepático, incluso en ausencia de cálculos biliares asociados (50 a 90% de los casos). ADM también puede ser revelada por un ataque de colecistitis alitiásica. El diagnóstico preoperatorio se basa principalmente en el ultrasonido (US), que identifica imágenes pseudo-quísticas intraparietales y artefactos de «cola de cometa». La resonancia magnética con secuencias de colangiografía por resonancia magnética es el examen de referencia con imágenes características de «collar de perlas». La ADM sintomática es una indicación para la colecistectomía, que resulta en la desaparición completa de los síntomas. La ADM asintomática no es una indicación para cirugía, pero el diagnóstico radiológico debe estar fuera de toda duda. Si hay alguna duda diagnóstica sobre la posibilidad de cáncer de GB, se justifica una colecistectomía. El descubrimiento de ADM en una muestra de colecistectomía no requiere vigilancia especial.