El voto es la piedra angular de nuestra democracia. La mecánica de cómo votamos, y cómo se cuentan esos votos, es fundamental para garantizar que nuestros votos sean significativos. EFF admite registros en papel para cada votación y auditorías automáticas de limitación de riesgos para cada elección. Nos opondremos a la legislación que no incluya esas dos medidas críticas. EFF se opone a la votación en línea.
En 2018, varios senadores introdujeron la Ley de Protección de Votos y Elecciones Estadounidenses (PAVE, por sus siglas en inglés). Esta propuesta exige el uso de boletas de papel y auditorías que limiten el riesgo en todas las elecciones federales, lo que asegurará que nuestro proceso democrático no sea secuestrado por piratas informáticos o potencias extranjeras. Es un gran paso adelante, y esperamos que el Congreso considere un proyecto de ley similar en una sesión futura.
Los registros en papel
Las máquinas de votación con pantalla táctil, las máquinas de conteo y otros dispositivos involucrados en las elecciones están sujetos a piratería informática. Tales ataques, por su propia naturaleza, pueden ser sigilosos y ambiguos. Un ataque hábil puede manipular las máquinas de votación y luego borrarse a sí mismo, lo que hace imposible probar después del hecho de que una elección sufrió interferencia. Los registros en papel aseguran que es posible detectar y corregir rápidamente dichas interferencias. Muchos estados aún no siguen esta práctica recomendada de referencia.
Auditorías de limitación de riesgos
Para detectar la manipulación de votos, es importante verificar algunos registros en papel a mano y no confiar en un recuento de máquinas.»Una auditoría no debería ser un acontecimiento especial durante una elección disputada. Las auditorías de alta calidad deben ser partes automáticas y regulares de nuestro proceso democrático. Las auditorías de limitación de riesgos (RLAS, por sus siglas en inglés) son una forma probada e innovadora de elegir una pequeña muestra de papeletas para el recuento manual, al tiempo que se logra un nivel muy alto de confianza estadística de que se detectará cualquier manipulación electrónica de votos. Esto los hace lo suficientemente baratos como para realizar auditorías en cada elección. A partir de 2018, tres estados han implementado mandatos de RLA, con Colorado a la cabeza. Los otros cuarenta y siete deberían hacer lo mismo lo antes posible.
No a la votación en línea
Las propuestas surgen de vez en cuando para permitir la votación desde casa o en el extranjero a través de teléfonos inteligentes o computadoras portátiles. Los expertos en seguridad son casi unánimes en que esto es inaceptablemente arriesgado, y EFF apoya esta conclusión.