¿Qué es un bosque tropical?
Los bosques tropicales son bosques de dosel cerrado que crecen a 28 grados al norte o al sur del ecuador. Son lugares muy húmedos, recibiendo más de 200 cm de lluvia por año, ya sea estacionalmente o durante todo el año. Las temperaturas son uniformemente altas, entre 20 ° C y 35°C. Estos bosques se encuentran en Asia, Australia, África, América del Sur, América Central, México y en muchas de las Islas del Pacífico.
Los árboles de la selva tropical son muy diferentes de los árboles de los bosques templados. En la selva tropical, los árboles crecen a un tamaño gigantesco, apoyados por fuertes contrafuertes en forma de puntales en la base del tronco que ayudan a estabilizarlos en suelos forestales poco profundos. Enormes enredaderas se enroscan alrededor de los troncos de los árboles.
Un bosque tropical maduro de tierras bajas consta de varias capas. La capa superior de vegetación consiste en árboles altos dispersos que se elevan por encima de una capa de dosel cerrada formada por las copas de otros árboles. El dosel es la parte más emocionante de la selva; es aquí donde tiene lugar la mayor parte de la floración y fructificación de los árboles, atrayendo a una variedad de criaturas espectaculares.
Debajo del dosel hay una tercera capa, formada por árboles más pequeños cuyas copas no se encuentran. Debajo hay una capa compuesta de arbustos leñosos y herbáceos. Finalmente, está la capa del suelo, que recibe muy poca luz solar.
Preocupación por la conservación
Los bosques tropicales tienen la biomasa viva más grande y cuentan con algunas de las tasas más altas de biodiversidad terrestre. Pero las selvas tropicales son quizás el hábitat más amenazado de la tierra y más vulnerable a la deforestación. Cada año, se destruyen unos 140.000 kilómetros cuadrados de selvas tropicales. Las selvas tropicales están siendo taladas por empresas madereras en busca de madera y taladas por personas para la agricultura. Las selvas tropicales más amenazadas son las de África occidental, donde las poblaciones humanas se duplican cada 20 años, y las de América Central y Asia sudoriental. Aunque grandes áreas de selva tropical permanecen en África Central y América del Sur, también están desapareciendo a un ritmo alarmante.
La degradación de los bosques y la deforestación en los países tropicales es un importante problema ambiental, social y económico, y seguirá siéndolo a menos que se adopten medidas al respecto. El tiempo es corto si queremos salvar las selvas tropicales restantes para las generaciones futuras y preservar la hermosa biodiversidad que albergan estas selvas tropicales.