Solo tiene sentido que la supermodelo Gisele Bündchen viva en una casa digna de una reina con su marido mariscal de campo de los Patriotas, Tom Brady. La acogedora mansión de Brookline, Massachusetts, de la pareja estrella, está actualmente en el mercado (Beth Dickerson de Sotheby’s Realty tiene el listado de $34 millones). Si bien es posible que no podamos permitirnos esta propiedad de lujo, Sotheby’s ha lanzado un recorrido en video de la casa absolutamente soñadora, para que podamos echar un buen vistazo a los interiores, y tal vez imaginar la vida en ellos.
Con terrenos enormes al aire libre, ventanas de gran tamaño y una oficina en casa que en realidad es un granero, esta casa será el hogar perfecto para quien compre la propiedad. Aquí hay nueve razones por las que es el lugar perfecto para que viva una familia de cinco (en caso de que necesite más convencimiento).
Gisele tiene su propio santuario.
«Este es mi santuario donde paso la mayor parte de mi tiempo», dijo en el video de Vogue mientras firmaba copias de su libro Lessons: My Path to a Meaningful Life. El espacio cuenta con estanterías abiertas, un pequeño escritorio de madera y una impresionante chimenea.
Sin mencionar que la oficina es en realidad el interior de un granero ubicado en un patio lateral, lejos de la casa principal.
El exterior de la casa cuenta con una mezcla de ladrillo y paneles blancos.
Un momento para apreciar el enorme camino de entrada también, por favor.
La elegante sala de estar se completa con una pared de ladrillo encalado.
Sí, estás viendo el televisor donde la familia Brady ve a Tom jugar durante los partidos fuera de casa.
Hay una abundancia de luz natural.
¡Tantas ventanas impresionantes! La cantidad de decoración ligera y neutra agrega textura y riqueza a cada habitación.
La cocina tiene una impresionante isla de mármol.
La mayoría de las personas se quejan de que no tienen suficiente espacio en el mostrador en sus cocinas. Eso claramente no es un problema para la tribu Brady, evidenciado por toda la extensión de Acción de Gracias que solo ocupa una parte de la isla de mármol.
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Incluso sus estantes son una preciosidad.
Echa un vistazo a las llamativas estanterías abiertas que tienen, que representan una fila normal de gabinetes superiores.
Su comedor tiene las vistas más impresionantes.
Lo que es realmente interesante es la mesa de comedor, que sienta seis sillas de mimbre. No todos los días se ve mimbre en un comedor, pero aquí, le da a la habitación una simplicidad rústica que evita que el espacio grandioso se sienta, bueno, grandioso. Por supuesto, es difícil incluso contemplar la mesa con la vista del piso al techo del patio trasero detrás de ella.
El patio trasero es espacioso.
¡Mucho espacio para lanzar una pelota de fútbol!
La decoración para exteriores es algo que querrás copiar.
La mesa de madera clara combinada con sillas cubiertas de blanco hace que la combinación sea atemporal y elegante.
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